10 consejos para evitar la adicción a las nuevas tecnologías.
La adicción a las nuevas tecnologías está a la orden del día entre los más jóvenes.
Cada vez son más los papás que acuden al despacho en búsqueda de ayuda profesional porque sus hijos están horas y horas de cara a la pantalla, ocasionando discusiones constantes en casa y bajo rendimiento académico.
10 Consejos para padres para evitar la adicción a las nuevas tecnologías
- Conoce a lo que juegan tus hijos. No tengas miedo por no saber suficiente, interésate. Comprobar el código PEGI de los videojuegos o preguntarle a tus hijos e incluso a otros padres. Interésate por las redes sociales que les gusta visitar y en que plataformas dedican su tiempo libre.
- Sé exigente con los tiempos. Tu hijo disfrutará más si se dosifica, así que enséñale a alternar las nuevas tecnologías con otras actividades. Negociad el tiempo de estudio, el tiempo de videojuegos y nuevas tecnologías y el tiempo de ocio no digital. Todo ha de tener su espacio y, en el futuro, te lo agradecerá.
- Propón alternativas. No sólo de videojuegos y cara a la Tablet o móvil puede vivir tu hijo. En caso de que empieces a notar un exceso de dedicación a los videojuegos o a la pantalla ten siempre preparadas alternativas de su gusto. Las mejores son las que permiten ser creativo o que favorezcan las relaciones personales, o las actividades al aire libre. Interésate por las alternativas que le gusten y poténcialas.
- Habla con tu hijo. El concepto de “jugar demasiado” o el uso de videojuegos poco adecuados para la edad pueden ser temas difíciles de abordar. En vez de reñir, dale tu opinión sobre los contenidos de dudosa moralidad o sobre si crees que juega demasiado. Convirtamos el limón en limonada: un juego violento puede darte una oportunidad inapreciable de hablar con tu hijo sobre la violencia, las drogas o cualquier conducta peligrosa o inapropiada.
- Promueve la lectura. Leer es esencial para el cerebro en todas las edades. Incluso si son novelas o literatura fantástica, al cerebro le viene estupendamente bien la lectura de cualquier tipo. Consíguelo.
- Minimiza el uso de pantallas. Si tu hijo tiene móvil, portátil, ordenador de sobremesa, consola, tableta y televisor, será difícil que no esté a todas horas mirando una pantalla o jugando a videojuegos. Con un móvil se tiene acceso a miles de juegos y páginas web que puede llevarse allí donde va. Negocia el uso de pantallas dentro y fuera de casa.
- Pon atención al gasto económico. Los videojuegos y algunas app son caras, y pocos de ellos son gratuitos. El sistema de micropagos de los videojuegos para móviles o los videojuegos “free to play” convierten a un móvil o una consola en una potencial máquina tragaperras.
- Preocúpate, pero no en exceso. Por mucho que tu hijo juegue a videojuegos o dedique mucho tiempo libre a las pantallas no va a enfermar o necesitar tratamiento clínico por adicción, siempre y cuando haga algo más en su vida que sólo jugar a videojuegos, como ir al colegio y aprender, salir con amigos, hacer deporte, etc. Preocuparte en exceso sólo te hará recelar y crear tensiones innecesarias en casa.
- Recuerda que sólo son juegos. Las conductas o situaciones dentro de un videojuego no son imitables en la vida real. Jugar a videojuegos violentos no va a convertir a tu hijo en una persona violenta. Si respetáis la calificación por edades y unos mínimos obvios de sentido común no debes temer por la salud emocional o mental de tu hijo.
- Pide ayuda profesional. Cuando tengas dudas, lo mejor es preguntar… Puedes consultarnos si consideras que tu hijo dedica demasiado tiempo a las nuevas tecnologías. Un psicólogo puede evaluar al menor y aplicar un tratamiento psicológico para prevenir posibles adicciones a las nuevas tecnologías. Además, existen guías y libros dirigidos a padres en las que puedes resolver la mayor parte de tus dudas.
