La gerascofobia se describe como el terror a la vejez y en otras ocasiones el pavor a crecer. Se le considera un trastorno de ansiedad por el miedo irracional que tienen las personas que padecen esta fobia.
Muchas personas que padecen gerascofobia consideran que su miedo a crecer y a hacerse mayores es excesivo, desmesurado.
Características más comunes de la Gerascofobia
Las características más comunes de las personas que padecen gerascofobia son el miedo a la responsabilidad de la vida adulta, la incapacitación de enfrentarse a la idea de encontrar una pareja, cuidar de un hogar, conservar un trabajo, entre otras.
Crecer solo les acercaría la enfermedad y la muerte.
Las personas con este tipo de fobia se alarman mucho por ver cambios en su cuerpo. Es por eso por lo que empiezan a comer, a encorvarse para ocultar su altura real y hablar en susurro agudo.
También suelen buscar en internet información sobre operaciones que revirtieron los efectos de la pubertad. La idea más común es desear parecerse a una estrella de Hollywood, a algún famoso o figura de referencia.
¿Qué tipo de personas tiene mayor predisposición a padecer gerascofobia?
Hay personas que, por sus características personales, pueden estar más predispuestas a desarrollar este trastorno que otras son. Serían aquellas personas que:
- Las personas que tienen una excesiva preferencia por todo lo relacionado con el cuidado de su aspecto físico.
- Aquellas que en la infancia han mantenido una serie de prejuicios negativos sobre la tercera edad.
- Individuos con altas ideas de grandeza o con una personalidad narcisista.
- Personas que tienen mayor dependencia o que sufren problemas mentales asociados a la vejez.
- Gente con alto grado de autoexigencia, que luchan por conseguir la imagen perfecta y con baja tolerancia a la frustración por la no consecución de objetivos.
- Personas que dependen de la imagen o se les exige mantenerse con un buen aspecto físico. Por ejemplo, profesiones relacionadas con las artes escénicas.
- Aquellos con rasgos de personalidad ansiosa, con dificultades de gestión emocional o con antecedentes de trastornos de ansiedad. Especialmente sensibles serían las personas con tendencia a la hipocondría.

Tipo de crianza recibido en la infancia que puede afectar a la gerascofobia
Los psicólogos especialistas han visto que las personas que padecen gerascofobia han tenido un apego ansioso ya que la madre o el padre durante su infancia recibieron un trato infantil (Cantar nanas, peinarles) o también un trato muy duro (en el colegio, con su propio cuerpo…).
También es común en este tipo de casos que hayan sufrido abuso en el colegio como bullying, o también abusos sexuales en la infancia. Es común después de experimentar este tipo de abusos que instiguen en el miedo irracional a la madurez sexual.
¿Cuál es el mejor tratamiento para la Gerascofobia?
El tratamiento para este tipo de fobias es un tratamiento enfocado en la ansiedad.
Se trabajan los pensamientos irracionales a la versión a crecer, encontrar las causas de las emociones negativas y enfrentarse a su miedo de manera controlada.
Es así como comienzan a adoptar posturas más erguidas, hablar y comer con normalidad y, en general, a preocuparse menos por convertirse en adulto.
Consejos para superar la gerascofobia
Aquí os dejamos estas pautas y consejos para no caer en la gerascofobia.
- Practicar actividades físicas que te mantenga activo.
- Cuidar los factores de riesgo para la salud, como la alimentación o el consumo de drogas.
- Practicar hábitos saludables como la lectura.
- Tener buena autoestima y capacidad de autoeficacia, así como de regulación de las emociones.
- Atender el aspecto cognitivo y mental.
- Fomentar las relaciones sociales y participar en la creación de buenos círculos de amistades.
Es muy común en personas que padecen esta fobia que también padezcan o hayan padecido otros síndromes como el llamado Síndrome de Peter Pan que aparece plasmado en la obra de teatro Peter Pan: el niño que no quería crecer.
Muchos niños tienen miedo a hacerse mayores debido a este tipo de obras.
En cambio, en el adulto existe el miedo a envejecer que aparece en el retrato de Dorian Gray. El temor de Dorian a hacerse viejo no es solo miedo al deterioro físico, sino también una aversión a la responsabilidad moral.
La gerascofobia, una fobia curiosa pero que cada vez se ve más presente en la consulta, ¿será por la presión social a mantenerse jóvenes?, ¿será por la belleza exaltada que a día de hoy quiere mantener tantísima gente?, ¿será por experiencias previas de la infancia?…
El equipo de INVESTE dispone de ambos profesionales para el tratamiento de este tipo de problemáticas, esta fobia puede empezar a limitarte en tu día a día y a traerte problemas más graves de salud tanto física como mental. No dudes en ponerte en contacto con nosotros si te sientes identificado o tienes un familiar o conocido con este problema. Podemos ayudarte.